Dotar nuestra casa de los elementos para poder ejercitarnos, no es difícil ni caro. Mis elementos de trabajo se pueden improvisar y cada uno puede añadir múltiples elementos....Usando el Cerebro claro está
Material Básico:
Barra de suspensión que se coloca en el cerco de una puerta porque para colgar gomas o cuerdas y recientemente he logrado agarrarme con las dos manos. Gomas gruesas, con dos logro mantenerme suspendido y me ayudan en muchos ejercicios, uso casco porque me aporta seguridad extra. Esterillas de gimnasia, gruesas y que no sean muy deslizantes. Puños de apoyo, permiten apoyar la mano lesionada, sobre todo si está semicerrada. Juguetes de manipulación, aquí reciclaremos los de nuestros nietos, as. La Pica, es una barra de plástico, también vale el palo de una escoba. Cuerda, de escalada o de náutica que sea suave de tacto, varios metros. Mancuernas ligeras, pueden sustituirse por recipientes de plástico llenos de agua. Bosu pequeño, es ideal para estimular sensaciones de pies, manos y el equilibrio. Balón inflable tipo cacahuete, para usarlo sin persona de ayuda, lo prefiero al redondo. Rulo de espuma dura, para equilibrios y sensibilidad del pie.
Los ejercicios con pelotas y balones son muy interesantes porque, además, implican una gran complejidad neuronal al exigir ajustes espacio-temporales, activación de sensaciones táctiles, el fortalecimiento del complejo hombro, brazo, mano, dedos. Además dan a la sesión un carácter agradable y lúdico. Personalmente mis dedos permanecen anquilosados, por una mezcla entre el descuido hospitalario y la evolución de mi daño neurológico y no puedo abrir la mano, por ello le dedico mayor atención.
El lanzamiento de objetos por encima del hombro es otro gesto natural que es fácil practicar desde sentado o arrodillado, yo lo inicié tirando bolas de papel arrugado, me facilita la acción de coger-soltar y relajar el brazo al lanzar. Cualquier habitación es un lugar válido para esta practica.
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